Esta ciudad esconde el paraíso del chocolate: sólo apto para amantes del dulce

Si eres un gran amante del chocolate, hay una ciudad europea que deberías visitar al menos una vez en la vida.Se trata de Zúrich, en Suiza, una ciudad encantadora debido a a una combinación única de factores. Sus impresionantes vistas a los Alpes, su ubicación junto a las orillas del lago y su belleza natural son solo algunos de los elementos que contribuyen a su atractivo.

Además, la ciudad está impregnada de una rica oferta cultural que incluye museos, galerías de arte y otros lugares de interés. No te pierdas la oportunidad de degustar las delicias culinarias más emblemáticas de Suiza durante tu paseo por Zúrich, como el chocolate y el fondee.

Esta ciudad europea es un paraíso para los amantes del chocolate

El centro histórico de Zúrich es una joya por descubrir, compuesto por cuatro encantadores barrios que rodean las ruinas de una antigua muralla medieval. Ubicado cerca del río Limmat y el Ayuntamiento (Rathaus), este pintoresco entorno está repleto de callejuelas y plazas llenas de encanto, así como de casas medievales y edificios gremiales renacentistas con fachadas de colores. Entre los puntos de interés se encuentran la calle comercial Bahnhofstrasse, las iglesias Grossmünster, Peterskirche y Fraumünster y la torre Grimmenturm .

Bahnhofstrasse es la calle más famosa de Zúrich, conocida por ser una de las más lujosas y exclusivas del mundo. Aquí se encuentran tiendas de renombre internacional, galerías de arte, cafeterías y chocolaterías, como la famosa Läderach Chocolatier Suisse.

La Iglesia de Grossmünster, construida entre los años 1100 y 1220, es uno de los monumentos más emblemáticos de Zúrich. Destaca por sus dos campanarios gemelos y su importancia histórica como lugar de inicio de la Reforma Protestante en Suiza. En su interior, se pueden admirar fabulosas vidrieras, una cripta románica y un claustro con magníficos capiteles románicos.

La Ópera de Zúrich, ubicada en un magnífico edificio neoclásico, es otro punto de interés destacado. Ofrece conciertos de ópera y ballet en un entorno elegante y distinguido. En el barrio de Lindenhof, la parte más antigua de la ciudad, se pueden explorar calles adoquinadas, tiendas de artesanos y ruinas romanas, además de disfrutar de vistas panorámicas desde la colina.

El Museo Nacional de Zúrich es otro punto destacado, ubicado en un impresionante edificio de estilo francés. Ofrece una amplia colección que abarca desde la prehistoria hasta la actualidad.

El Jardín Botánico de Zúrich es un lugar tranquilo y gratuito para pasear y relajarse entre una gran variedad de plantas y flores. Con tres invernaderos y más de 7.000 especies de plantas, es perfecto para disfrutar de la naturaleza en pleno corazón de la ciudad.

El Lago de Zúrich, situado al sureste de la ciudad, es otro lugar imprescindible para visitar. Con más de 40 kilómetros de longitud y forma de plátano, ofrece la oportunidad de realizar relajantes paseos en bicicleta o a pie por sus orillas.

Museo Lindt Home of Chocolate

Descubre el museo interactivo Lindt Home of Chocolate, una atracción fascinante construida cerca de la icónica fábrica Lindt & Sprüngli. Sumérgete en el fascinante viaje del cacao desde su origen hasta tu mesa con un tour completo que incluye una audioguía informativa.

Al entrar, te encontrarás con la impresionante fuente de chocolate, una obra maestra de más de nueve metros de altura que te da la bienvenida al museo. Aprenderás sobre la historia del chocolate y su impacto global mientras exploras exposiciones multimedia que te llevarán a través de cada etapa del proceso de producción.

Asimismo, disfrutarás de una experiencia sensorial única en la sala de degustación, donde podrás deleitarte con una amplia variedad de exquisitas delicias de chocolate. Desde allí, observarás la línea de producción a través de ventanas panorámicas y contemplarás cómo se crean nuevos productos con maestría y precisión.

 

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Qué ver en Suiza

Además de la «ciudad del chocolate», Suiza alberga lugares impresionantes. Desde las majestuosas cataratas del Rin hasta los encantadores pueblos alpinos, el país ofrece una experiencia inolvidable en cada rincón.

El viaje comienza en Lucerna, donde el antiguo puente de madera Kapellbrücke se alza sobre las aguas del río Reuss, ofreciendo vistas impresionantes del paisaje circundante. Este puente, el más antiguo de Europa, es un símbolo de la rica historia medieval de la ciudad.

Desde Lucerna, aventúrate en un viaje en tren hacia los Alpes suizos a bordo del famoso Bernina Express. Este tren panorámico te lleva a través de algunos de los paisajes más impresionantes del mundo, desde los viaductos de Brusio hasta el valle de Engadina.

No puedes perderte una visita a las cataratas del Rin, las más grandes de Centroeuropa, que impresionan con su imponente belleza y su caudaloso flujo de agua. Desde Zúrich, puedes embarcarte en una emocionante excursión que te acercará a la majestuosidad de estas cascadas naturales.